MÉXICO, D.F., octubre 3.- La Policía Judicial del
Distrito Federal obtuvo el arraigo en contra de dos sujetos sospechosos
de haber asesinado a las periodistas Marcela Yarce y Rocío González
Trápaga, cuyos cuerpos fueron abandonados en Iztapalapa hace un mes.
El arraigo fue concedido con base en pruebas periciales efectuadas
por la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) en
las que se demostró ante el agente del MP que uno de los detenidos se
comunicó en al menos una ocasión con Marcela Yarce, además de que sus
huellas fueron localizadas en el vehículo Pontiac que ella conducía.
Fuentes de la PGJDF confirmaron el arraigo por 30 días en contra de
Omar u Óscar “N”, detenido la tarde del sábado 1 de octubre en el
Campamento 2 de Octubre, localizado en la Calzada de La Viga y Juan
Álvarez, en Iztapalapa, en donde fueron hallados los cuerpos de las dos
periodistas y el vehículo de Marcela.
La PGJDF informó a EL UNIVERSAL que una de las líneas de
investigación es la del robo, pero aclaró que esto no es definitivo y
por ello solicitaron y obtuvieron el arraigo.
La saña con la que fueron asesinadas las periodistas indica que los
homicidas ejercieron mayor violencia al no obtener la información que
exigían mientras las interrogaban.
El pasado 1 de septiembre, la PGJDF confirmó el hallazgo de dos
cadáveres femeninos en las inmediaciones de un paraje detrás del panteón
de San Nicolás Tolentino, en la delegación Iztapalapa.
Horas antes, en las redes sociales, se reportaba que las periodistas
no habían llegado a sus casas desde la noche del 31 de agosto, y que se
desconocía su paradero. La última comunicación entre ellas fue a las
09:30 de la noche de ese día, cuando quedaron de verse afuera de la
estación Balderas del Metro, donde están las oficinas de la revista
“Contralínea”, en la que trabajaba Yarce.
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