Según el reporte anual de la ONG Artículo 19, sobre la
violencia contra la prensa, presentado bajo el título “Estado de censura”,
durante estos dos últimos años se registraron 656 agresiones de este tipo -330
en 2013 y 326 en 2014-, superando así la media de 182 ataques anuales que se
daba en el sexenio anterior de Felipe Calderón.
Mientras que con Calderón se agredía a un periodista cada
48,1 horas, con Peña Nieto esto ocurre cada 26,7 horas; estas violaciones se
ejercen, en el 48% de los casos, a manos de funcionarios.
La asociación, defensora de la libertad de expresión
manifiesta una “especial preocupación” por los diez periodistas asesinados
-cinco por año- en la Administración actual, así como por los cuatro
comunicadores desaparecidos.
También crecieron “considerablemente” las agresiones en el
ámbito digital, en el cual se documentaron 56 acciones de hostigamiento o
amenazas en redes sociales u otras plataformas, en las que sus responsables
quedaron amparados en el anonimato de la red.
Entre ellos, se vivieron una docena de ataques directos
contra portales de información, “lo que provocó la imposibilidad de acceder al
material informativo, en algunos casos durante días”.
“De seguir presentándose esta tendencia, Internet dejaría de
ser el santuario donde muchos periodistas y medios de comunicación han
encontrado la posibilidad de existir”, advierte en el informe el director de
Artículo 19 para México y Centroamérica, Darío Ramírez.
Entre los tipos de agresiones que distingue Artículo 19
durante el último año se encuentran, entre otros, 142 casos de acciones contra
periodistas físicas o materiales, 53 de intimidación, 45 de detención
arbitraria y 14 de hostigamiento judicial.
El Distrito Federal, Veracruz, Quintana Roo, Guerrero y
Oaxaca son los estados que presentan unas cifras más elevadas de agresiones
durante el Gobierno actual.
En el caso concreto del Distrito Federal, se ha producido un
aumento del 70% en las acciones violentas, que se justifica por el auge de los
ataques registrados durante actos de protesta social, explica la organización.
Las cifras que revela el informe constituyen para Artículo
19 la prueba del clima “hostil” para ejercer el periodismo en el país, donde se
produce un “estado de censura generalizada” que implica un deterioro de la
libertad de prensa “real, tangible y medible”.
Contar con “uno de los sistemas más robustos de protección
en todo el mundo”, compuesto por leyes, mecanismos, fiscalías y programas, no
impide que la violencia siga creciendo debido a la “impunidad” de quienes
actúan contra la prensa.
México vive “un estado de miedo”, y hacer periodismo en este
contexto afecta “severamente” no solo al derecho individual de los
comunicadores de ejercer su profesión, sino también al derecho colectivo que
tiene la sociedad de recibir información, recuerda la organización.
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