La organización criminal de "La Mano con Ojos" sufrió un golpe fuerte con la captura de su líder Óscar Oswaldo García Montoya, a manos de agentes de la Procuraduría General de Justicia del estado de México.
Los reacomodos dentro de la organización y el enfrentamiento con
otros narcomenudistas que pretenden operar en la zona que controló
García Montoya, han generado varios episodios de violencia.
En el estado de México, las autoridades mantienen la búsqueda de los
integrantes de "La Mano con Ojos", aunque tanto el procurador Alfredo
Castillo Cervantes como el titular de la Agencia de Seguridad Estatal,
Salvador Neme Sastré, han señalado que por ahora la prioridad de las
autoridades será erradicar la violencia del oriente de la entidad,
derivada del enfrentamiento entre "La Familia Michoacana" y "Los
Caballeros Templarios".
EL UNIVERSAL Edomex te enlista los datos más destacados de lo que ha
ocurrido con esta célula criminal, a poco menos de dos meses de la
detención de su principal liderazgo:
Violencia extrema
Desde las primeras horas posteriores a la captura del líder de “El Compayito", el procurador del estado de México, Alfredo Castillo Cervantes, lo advirtió: sobrevendrían algunos asesinatos.
Algunos de esos crímenes serían muy espectaculares y mediáticos,
aseguró el funcionario que calificó a la organización criminal como “un
dolor de cabeza para el estado de México” y la prioridad de las
autoridades para combatir la violencia.
Desde la detención de García Montoya, a cargo de elementos de la
PGJEM, varios sucesos violentos han tenido lugar tanto en territorio
mexiquense como en la ciudad de México, otra de la regiones donde “La
Mano con Ojos” opera.
Los homicidios se han caracterizado por la violencia
extrema y mediática de la célula criminal: decapitaciones y hasta
colgados, como ocurrió el 15 de agosto en Interlomas, una de las zonas
más exclusivas del estado de México.
El día de ayer, en un automóvil que fue robado en Tecámac, fueron
dejados dos cuerpos decapitados en pleno Periférico, casi esquina con
Conscripto. El hallazgo venía acompañado de un mensaje, en el cual “La
Mano con Ojos” se atribuía los asesinatos.
Las autoridades capitalinas han señalado que trabajarán en
coordinación con la Procuraduría General de Justicia del estado de
México, a fin de poder cruzar datos. Hasta el momento, la PGJEM no ha
participado en las investigaciones de los asesinatos en Periférico.
Imitadores
La última incursión de “La Mano” en el Edomex, ocurrió el pasado 12
de septiembre, cuando dos cadáveres fueron dejados en Huixquilucan.
En aquella ocasión, Castillo Cervantes apuntó dos hipótesis posibles
en cuanto a la autoría de los crímenes: "Hay dos hipótesis que sea esta
persona sucesor conocida solo como El Comandante, el que haya realizado
este evento, y la segunda puede ser que sea alguna especie de copycat,
como en las extorsiones que hay gente que dice que es de La Familia o
Los Zetas".
El titular de la PGJEM detalló que al ver "la fama" que alcanzó "La
Mano con Ojos", podría ser que algún imitador quisiera utilizarlo.
Estrategia para evadir cargos
Además de la estrategia que siguió “La Mano con Ojos” para ganar
renombre a través de hechos mediáticos, la organización ha
“evolucionado” en otro tipo de estrategias.
Una de ellas ha sido la de que sus sicarios no portan armas salvo
cuando cometerán un crimen, esto, con la finalidad de evadir mayores
penas en caso de ser detenidos.
A inicios de septiembre, la procuraduría mexiquense realizó la
detención de algunos importantes miembros de la célula criminal, quienes
admitieron no portar armas para no enfrentar cargos.
“Son parte de las estrategias que han ido adaptando los integrantes
de las células delictivas”, explicó entonces Castillo Cervantes.
Los jóvenes sicarios
Una característica que destaca a “La Mano con Ojos” es también la
juventud de sus integrantes. “El Compayito”, su líder fundador, tiene
sólo 36 años.
El presunto criminal, que se atribuye el asesinato de 300 personas y
el ordenar el homicidio de otras 300, tuvo los inicios de su carrera
delictiva en el cártel de los Beltrán Leyva, donde algunos de sus integrantes como es el caso de Édgar Valdez Villarreal "La Barbie" o
José Jorge Balderas Garza "El JJ", tampoco superan la barrera de los 40
años; en el primer caso la edad de "La Barbie" es 38 años, mientras que
"El JJ", 34.
Este patrón de edades es una constante en esta organización
delictiva, pues sus principales integrantes no superan los 40 años,
incluso algunos de ellos apenas rebasan la mayoría de edad. También los
hay menores, "El Mane", detenido por la PGJEM, cuenta con sólo 16 años.
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