lunes, 26 de diciembre de 2011

La lujosa y abandonada guarida de La Barbie


El narcotraficante Edgar Valdez Villarreal, "la Barbie", que sonríe durante su presentación en el centro de mando …
A casi un año de que Édgar Valdez Villarreal, alias La Barbie, fuera capturado por el gobierno federal, su finca y última guarida, enclavada en la zona montañosa del municipio mexiquense de Lerma, está abandonada y sin el resguardo de ninguna autoridad.

Esta propiedad, de quien fuera operador de Arturo Beltrán Leyva, El Barbas, no cuenta tampoco con ningún sello que indique que el lujoso inmueble se encuentre asegurada por las autoridades.

Mucho menos existen restricciones para acceder al camino de terracería llamado Naceagua por el cual se llega finalmente a la finca de Édgar Valdez Villarreal.

Según lo dispuesto por el artículo 40 de la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP), las autoridades están obligadas a conservar las pruebas e indicios de probables hechos delictivos para que no pierdan su calidad probatoria.

Pero, de acuerdo con algunos habitantes de Salazar, desde la captura de La Barbie nunca hubo vigilancia en la propiedad.

El desconocido estatus legal de la finca

Hasta el momento la Procuraduría General de la República no ha dado información acerca de cuál es el estatus legal sobre la finca, pues a diferencia de los inmuebles de otros integrantes de la delincuencia organizada para éste, no se obtuvo, hasta donde se sabe, una orden judicial para su cateo.

Además tampoco se ha informado si efectivamente esta residencia pertenece a La Barbie o se trata de un lugar que rentaba. Pues en la información proporcionada surgió la versión de que el inmueble pertenecía a un colombiano dedicado al negocio de la maquinaria pesada.

Posterior a la detención de Edgar Valdez las autoridades sí entraron al domicilio, por lo que incluso se logró obtener imágenes del interior de este lujoso rancho valuado, tanto solo el terreno, en 3 millones de pesos.

Existe la posibilidad de que a este propiedad se le aplique la Ley de Extinción de Dominio, la cual permite al gobierno federal quitar los bienes a aquellas personas que incurran en delitos contra la salud, trata de personas, robo de automóviles, diversas formas de delincuencia organizada y secuestro.

Es posible que el tema jurídico de este inmueble se encuentre ya en manos del Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE), instancia que tendría la faculta, en su momento, de comercializar la finca.

Cambio de vida

En el poblado de Salazar, municipio de Lerma, estado de México, nadie olvida los días en que se detuvo a Édgar Valdez Villarreal.

Cualquier habitante de Salazar sabe en dónde se encuentra el lugar en donde La Barbie tenía su guarida, es decir en el paraje conocido como Cañada de Alférez, una diminuta localidad con casitas de lámina y tabiques de adobe, a excepción de la lujosa finca, misma que se encuentra al final del camino de terracería llamado Naceagua.

Sin embargo ya en Alférez la situación cambia, la gente, evidentemente pobre que vive muy cerca de la casa de Édgar Valdez Villarreal, es menos cortes con los extraños. Ninguno de los pobladores quiere dar informes acerca de si hay presencia policial en la zona o si en definitiva la propiedad fue abandonada.


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