Director de seguridad de Chalco RENUNCIA

Chalco, Méx.- El director de Seguridad Pública Municipal, Sergio Lázaro Miranda Valdés, presentó su renuncia al alcalde priista, Juan Manuel Carbajal Hernández, porqué durante un año y medio no se le permitió trabajar y se le negó todo tipo de apoyo para mejorar la seguridad en este municipio, donde son constantes “los levantones” y ejecuciones.

Sergio Lázaro era un mando de la Agencia de Seguridad Estatal (ASE) que había enviado el gobierno del estado de México al municipio de Chalco, para reforzar la seguridad y que hubiera una mejor coordinación con las diferentes corporaciones policiacas.
Este director se había sostenido a pesar de que el presidente municipal en reiteradas ocasiones lo presionó para que renunciara; asimismo, le negó recursos económicos y equipo para cumplir con el objetivo de dar mejores resultados en seguridad.
Sin embargo, el mando policiaco ya no pudo resistir la presión interna de otros subdirectores que intentaban controlar al cuerpo policiaco, pues sostenía constantes fricciones con el subdirector José Ángel “El Chepo” Villa Morales, quien recibía órdenes directas del alcalde de Chalco.
Además, Chalco, en los últimos meses se ha convertido en el más violento de la zona oriente del estado de México, el pasado 26 de junio, fueron encontrados ejecutadas tres mujeres y un hombre, con un cartel de la Familia Michoacana.
Asimismo, se ha registrado “levantones” cuyas víctimas no vuelven a aparecer o son parte de las ejecutados en esta región.
Pero también hay constantes quejas de asalto al transporte como lo manifestó La Cámara Nacional del Transporte de Pasaje y Turismo (Canapat) que denunció que sus camiones había sufrido 30 asaltos en un mes, sin que Sergio Lázaro Miranda Valdés, realizara operativos para detener a las bandas delictivas.
Por otro lado, el alcalde Juan Manuel Carbajal, también destituyó al director de Gobierno municipal, José Armando Gómez Pacheco, por ineficiente y no poder resolver los conflictos sociales que se habían registrado en este municipio, como el deslave en el pueblo de Santa María Huexoculco, donde los vecinos le habían advertido al presidente municipal y al director de Gobierno, del grave riesgo que se corría.