Nezahulacoyotl, Edomex.- Otra vez la ira
ciudadana se desbordó y nada pudo contenerla cuando comerciantes se
enardecieron al ver que un trío de ladrones trataron de asaltar una
plomería y al no poder hacerlo mataron a tiros al comerciante, por lo
que detuvieron a uno de los ladrones a quien mataron a golpes.
Este acto de enojo popular tuvo lugar la tarde de este miércoles, en la esquina de la calle Miguel Negrete y calle 7, colonia Juárez Pantitlán, en un populoso barrio de comerciantes que se encuentra a unos pasos de la avenida Zaragoza y justo en los límites entre el Estado de México y el Distrito Federal.
En el lugar se pudo saber, que la vida comercial pasaba como cualquier día entre el molino, negocios de material eléctrico y ferreterías, así como la plomería, cuando de pronto apareció por la calle una motoneta, de esas que son comunes, con varias personas a bordo, quienes llegaron hasta esta equina, al parecer con la intensión de asaltar la plomería, no obstante que se trata humilde local de láminas metálicas.
Aunque los comerciantes y vecinos del lugar repitieron no haber visto nada, la policía pudo saber que el asaltante linchado respondió en vida el nombre de Juan Vicente Gutiérrez, de 25 años de edad, a quien apodaban "El Patachin" por carecer de una pierna, y quien quedo bocarriba con los brazos cruzados como si se cubriera de algún taque.
Cabe resaltar que Juan Vicente (a) "El Patachín", ya era conocido delincuente de la zona, y hasta se pudo saber que hace cuatro meses fue detenido con más de un kilo de marihuana, aunque se desconoce cómo es que recuperó su libertad.
También se dice que usaba una prótesis para andar por las calles, pero que en la pasada detención se cayó de la motoneta en que viajaba, por lo que salió volando su prótesis en la colonia La Perla, de este mismo municipio, razón por la que ahora no la traía y fue alcanzado y ultimado a golpes.
Paradójicamente, este atraco y doble homicidio ocurrió frente a un letrero que indica sobre las medidas de seguridad que han tomado los comerciantes, y la comunicación que tienen para evitar ser víctimas de la delincuente, aunque esta vez no solo ha muerto un comerciante honesto, sino que uno de los delincuentes pagó con su vida.
Este acto de enojo popular tuvo lugar la tarde de este miércoles, en la esquina de la calle Miguel Negrete y calle 7, colonia Juárez Pantitlán, en un populoso barrio de comerciantes que se encuentra a unos pasos de la avenida Zaragoza y justo en los límites entre el Estado de México y el Distrito Federal.
En el lugar se pudo saber, que la vida comercial pasaba como cualquier día entre el molino, negocios de material eléctrico y ferreterías, así como la plomería, cuando de pronto apareció por la calle una motoneta, de esas que son comunes, con varias personas a bordo, quienes llegaron hasta esta equina, al parecer con la intensión de asaltar la plomería, no obstante que se trata humilde local de láminas metálicas.
Aunque los comerciantes y vecinos del lugar repitieron no haber visto nada, la policía pudo saber que el asaltante linchado respondió en vida el nombre de Juan Vicente Gutiérrez, de 25 años de edad, a quien apodaban "El Patachin" por carecer de una pierna, y quien quedo bocarriba con los brazos cruzados como si se cubriera de algún taque.
Cabe resaltar que Juan Vicente (a) "El Patachín", ya era conocido delincuente de la zona, y hasta se pudo saber que hace cuatro meses fue detenido con más de un kilo de marihuana, aunque se desconoce cómo es que recuperó su libertad.
También se dice que usaba una prótesis para andar por las calles, pero que en la pasada detención se cayó de la motoneta en que viajaba, por lo que salió volando su prótesis en la colonia La Perla, de este mismo municipio, razón por la que ahora no la traía y fue alcanzado y ultimado a golpes.
Paradójicamente, este atraco y doble homicidio ocurrió frente a un letrero que indica sobre las medidas de seguridad que han tomado los comerciantes, y la comunicación que tienen para evitar ser víctimas de la delincuente, aunque esta vez no solo ha muerto un comerciante honesto, sino que uno de los delincuentes pagó con su vida.
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