Emily Honey Martínez González, de 11 años, y su padre,
Roberto Martínez Ledesma, de 57, fueron las personas que se reportaron como
desaparecidas hace pocos días, mismos que habían estado en una fiesta familiar
dentro de su casa, en el poblado de San Pablo Tecalco, el pasado sábado, para
amanecer domingo.
Sin embargo, al otro día, al mediodía, cuando fueron a
visitarlos otros familiares, estos ya no estaban, pero sí desorden en la casa y
manchas de sangre por varios puntos del hogar.
Luego de esto, Fredy Sosa Castillo, primo de la menor, dijo
que el fue el último en verlos antes de irse de la fiesta, pero que unos
sujetos lo habían secuestrado al salir, sin embargo, ya detenido, le confesó al
hermano de Emily lo que había ocurrido.
El sujeto confesó que ebrio y bajo los influjos de la droga,
se brincó a la casa donde el padre y la hija estaban solos, para luego abrirles
la puerta a otros cuatro hombres que ingresaron a violar a la menor, a quien
posteriormente asesinaron.
Luego de que policías de varios municipios se sumaran a la
búsqueda de ambos cuerpos, misión en la que descubrieron que dentro de la casa
fue quemado algo, al parecer las cobijas de las camas, las cuales no estaban,
hecho que tomó algunos días, el primo confesó finalmente el doble homicidio y
el lugar donde los habían arrojado.
En este momento los cuerpos se encuentran en el Servicio
Médico Forense local, donde la familia acudirá a reconocer los cuerpos y donde
se iniciará el proceso por este inexplicable crimen familiar que consternó a
toda la comunidad y destrozó a una familia.
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