Los
habitantes del municipio de La Paz, Edomex; y el diputado local Fernando
González Mejía, se dieron tiempo para
festejar la temporada y organizaron una posada navideña.
Al
evento asistieron cinco mil personas, acompañados de infantes que gustosos
quebraron las tradicionales piñatas, formaron largas filas para recibir un regalo.
Desde
las catorce horas un ejército de niños
colmaba ya el lugar del evento. Alguno que otro pequeñín faltaba por
llegar y haciendo grandes esfuerzos, de la mano de su madre, inclinando
su diminuta humanidad hacia delante, con una enorme sonrisa en el rostro y con
la vista puesta ya en sus amiguitos que se le habían adelantado, se esforzaba por remolcarla para participar de la diversión.
Fernando
González Mejía, dirigió unas palabras a
los asistentes. Dijo que “la convivencia debe fomentarse, pues es una forma de
estrechar los lazos entre los que menos tienen, para los largos y difíciles
períodos de lucha”. Asimismo, señaló que “la temporada navideña y las
tradiciones mexicanas son una buena
oportunidad para convivir, divertirse, descansar brevemente y a seguir
luchando”.
Pero
la posada era para estar alegres, la repartición de dulces, refrescos y demás
empezó a todo vapor. Después uno a uno, los aporreados cuerpos de las piñatas
fueron cediendo ante los palos prodigados por los niños que, uno a uno también,
los ojos vendados, rodeados de la infantil
muchedumbre, pasaban al centro
esperando el “dale, dale, dale…” y entre la rifa de mas de mil artículos
para el hogar como licuadoras, lavadoras, refrigeradores, etc.
Conforme
avanzaba la noche y el cansancio hacía presa de los pequeños, los papás se
preparaban ya para lucir sus mejores pasos en la pista de baile. Amenizado por
Aarón y su grupo Ilusión, la misma forma, un imitador de Juan Gabriel, un grupo
norteño y músicos rindiendo tributo a la Sonora Dinamita cerraron con broche de
oro el magno festejo.
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